domingo, 18 de marzo de 2012

COMPRENDER A CRISTO DESE MARIA


Los Evangelios dan gran relieve a los misterios del dolor de Cristo. La piedad cristiana especialmente en el tiempo de Cuaresma con la práctica del Via Crucis se ha detenido siempre sobre los momentos de la pasión instruyendo que son el culmen del amor y la fuente de nuestra salvación , el acompañar el camino de la cruz de Jesús. Tal vez en el Via Crucis vemos más cercana a nosotros la muestra de éste amor grande de Jesús, vemos reflejado aquella Palabra que el mismo nos dice no hay más amor que dar la vida por los hermanos.Recordarás los Vía Crucis de Semana Santa tiempo privilegiado de contemplar a Jesús en su Pasión o tal vez así como para muchos de los que compartimos la catequesis tenemos ya como hábito el rezo del rosario también para otros será alguna vez en la semana el rezo del Via Crucis pero lo importante que es en éste camino de la cruz contemplar el amor de Jesús por nosotros. Por eso el rosario escoge algunos momentos de la pasión. Nos invita a cada uno de nosotros orantes a fijar en esos momentosd de la pasión de Jesús la mirada, poder descubrir el corazón amoroso de Jesús, poder revivir aquel misterio grande de amor. Todo el camino de meditación se abre con Getsemaní donde Cristo vive un momento particularmente angustioso frente a la voluntad del Padre,tiene que luchar contra la debilidad de la carne que se inclina a revelarse, que no se haga mi voluntad sino la tuya. Porqué yo tengo que pasar ´éste sufrimiento? La pregunta que tantas veces nos hacemos y allí Cristo se pone en lugar de todas las tentaciones de la humanidad y frente a todos los pecados de los hombres para decir al Padre:no se haga mi voluntad sino la tuya Este si cambia el no de Adán y Eva en el Edén. Este si que se haga tu voluntad es el si que va cambiar la historia de la humanidad. Cuanto le costaría ésta adhesión a la voluntad del Padre para descubrir cuanto amor,cuanta renuncia en Jesús alcanza solamente seguir contemplando el resto de los misterios del rosario a partir de éste el de la oración de Jesus en el huerto de Getsemaní,con la Flagelación,la coronación de espinas, con la subida al Calvario,con la muerte en la Cruz se ve sumido Jesús en la mayor ignominia. Aquella expresión Ecce Homo aquí está el hombre,éste es el hombre. La oración en el huerto de Getsemaní abre éste encuentro de pasión, la flagelación,la coronación de espinas,la subida con la cruz a cuestas y la muerte en la cruz en tus manos encomiendo mi Espíritu. En éste oprobio no solo se revela el amor de Dios sino el sentido mismo del hombre.Quien quiera conocer al hombre ha de saber descubrir el sentido del misterio y del cumplimiento en Cristo de la voluntad de Dios. De éste Cristo como va a escribir Pablo a los Filipenses en el capítulo 2 que se humilla por amor hasta la muerte y muerte de cruz.Los misterios de dolor llevan al creyente a cada uno de nosotros a revivir la muerte de Jesús. Nos lleva a ponernos al pie de la cruz junto a María para penetrar con ella en la inmensidad del amor de Dios al hombre y sentir toda su fuerza que va regenerando en la naturaleza humana. Revivir la muerte de Jesús poniéndonos al pie de la cruz junto a María. Una hermosa propuesta que nos hace la tradición de la Iglesia, que nos hace Juan Pablo II cuando nos propone contemplar los misterios de dolor. En éste revivir que no es mero recuerdo.Cuando hacermos memoria esa memoria hace que el gesto de amor vuelva hacia el actual.Nos podemos hacer ésta pregunta Cuál es la cruz que me está costando cargar? Te parece que contemplando el camino de los misterios dolorosos podés hacer más llevadera su carga?
Comprender a Cristo desde María. Cristo es el Maestro por exelencia,es el revelador y la revelación. No se trata solo de comprender las cosas que El ha enseñado. Tal vez aquello que más nos cueste sin duda exige un corazón grande comprender a Jesús que maestra más experta que María. Si en el ambito divino es el Espíritu el maestro interior que nos lleva a la plena verdad de Cristo entre las creaturas nadie mejor que ella conoce a Cristo, nadie como su madre puede introducirnos en un conocimiento profundo de su Hijo. El primero de los signos llevadio a cabo por Jesús, uno de los que contemplamos en los misterios de la luz es la transformación del agua en vino en las bodas de Caná y éste signo nos muestra precisamente como Maestra. Exhorta a los servidores a ejecutar la disposición de Jesús. En el capítulo 2 del Evangelio de Sn Juan lo recordamos:hagan lo que El les diga y podemos imaginar que ha desempeñado ésta función de Maestra también con los discípulos después de la Ascención de Jesús cuando se quedó con ellos esperando el don del Espíritu Santo,cuando los confortó en la primera misión. Por eso recorrer con María las escenas del rosario es como ir a la escuela de María para leer a Cristo,para penetrar sus secretos,para entender su mensaje.Así como Ella fue quien tuvo el privilegio de contemplarlo, de verlo crecer hoy podemos recordar esto:María en cada misterio del rosario nos enseña porque es escuela para leer a Cristo,para penetrar sus secretos,para entender su mensaje. Una escuela,la de María,mucho más eficáz si se piensa que Ella la ejerce consiguiéndonos abundantes dones del Espíritu Santo y nos propone al mismo tiempo el ejemplo de aquella peregrinación de la fe en la cual es Maestra incomparable. María hizo con su vida ésta peregrinación en la fe y por eso también nos alimenta, nos fortalece y nos consigue estos dones abundantes del Espíritu Sabto. Ante cada misterio del Hijo Ella nos invita como en su Anunciación a presentar con humildad los interrogantes que conducen a la luz pero es Ella la que nos enselña la obedienmcia de la fe y el camino He aquí la esclava del Señor,h´gase en mi según tu Palabra El rosario nos transporta místicamente junto a María dedicada a seguir el crecimiento humano de Cristo en la casa de Nazaret.Por eso María nos educa,nos modela con la misma diligencia hasta que Cristo sea formado plenamente en nosotros.Es María la que nos va acompañando. Es Ella la que nos educa y modela hasta que Cristo sea formado plenamente en nosotros. Donde está la Madre está el Hijo. Siendo María de todas las creaturas la más conforme a Jesucristo se sigue que de todas las devociones nos dice Juan Pablo II la que m´más consagra y conforma un alma a Jesucristo es la devoción a María. De tanto corazón amoroso que podemos tener para dirijirnos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. De tanto amor que nos regala la Santísima Trinidad que nos va ayudando a conformar nuestra alma a Jesucristo es también loa devoción a María y cuanto más esté consagrada un alma a loa Santísima Vírgen tanto más lo estará Jesús. En el rosario el camino de Cristo y el de María se encuentran profundamente unidos. María no vive más que en función de Cristo. Comprender a Cristo desde María. Entrar en el corazón de María para entrar en el corazón de Jesús. Cuanto que nos regala el rezo del rosario. Cuanta experiencia que se nos invita a realizar cada día cuando nos acercamos a cada uno de sus misterios. Es que nos encontramos verdaderamente con Jesús
En medio del dolor siempre brilla la luz del Resucitado como comenzó a brillar en aquella noche de Belén en el nacimiento del Niño Dios. Por eso rezar el rosario, contemplar el camino de la cruz,configurarnos con Jesús,comprenderlo desde María implica ver toda su vida y siempre tenemos ante nosotros ésta esperanza,ésta mirada de fe,ésta certeza de que Jesús ha vencido definitivamente la muerte con su Resurrección. Esa es nuestra alegría mientras que cada día hacemos también nuestra aquella Palabra de Jesús en Getsemaní que recordábamos pero que no se haga mi voluntad sino la tuya
Los días martes y viernes son los que la Iglesia recomienda la meditación de los misterios de dolor pero también abrimos éste horizonte al tiempo de Cuaresma,a la Semana Santa una oración particular por los difuntos como devoción se nos propone también en esos días extras para decirlo de alguna manera.Cada momento que te pongas a rezar el rosario podes contemplar aquellos misterios que te van ayudar a caminar y marchar en el momento. Allí está la importancia de tener todo éste amplio panorama que nos regala el rezo del rosario en cada uno de sus misterios. De Jesús en una vida entregasda al servicio de la Buena Noticia. Contemplamos a Jesús en su confianza sin límites a Dios Padre también a María Madre fuerte y cercana.Cada vez que rezamos los misterios del Santo Rosario contemplamos a Jesús en su confianza sin límites a Dios Padre. Jesús sabe aun en medio de su dolor,de su soledad,sabe que cumple la voluntad del Padre y que el Padre no lo abandonará jamás y allí al pie de la cruz María madre fuerte y cercana.Después de haber escuchado la Palabra y centrado en el misterio cuando lo enunciamos es natural que el ánimo se eleve hacia el Padre. Jesús en cada uno de los misterios del rosario nos lleva siempre al Padre.El nos quiere introducir en la intimidad del Padre para que digamos con El Abbá Padre. En ésta relación con el Padre nos hace hermanos suyos y entre nosotros comunicándonos el Espíritu que es a la vez suyo y del Padre. Padrenuestro puesto como fundamento de nuestra meditación que tiene como centro a Jesús que nos acompaña con el rezo repetitivo del Ave María para descubrir la aceptación de María al plan de Dios Por eso después de anunciar el misterio cuando estamos rezando el rosario la primera oración que hacemos escuchamos la Palabra hacemos si es posible un momento de silencio para contemplar y escuchar la Palabra la oración del Padrenuestro que nos centra la mirada en Dios Padre desde Jesús y después viene ´`esta repeticiíón del Ave María.Por eso la oración del Padrenuestro,la repetición de 10 veces el Ave María hace que la meditación del misterio aun cuando lo hagamos en el silencio o en la soledad vde nuestra casa sea una experiencia profundamente eclesial.Sin duda cuando terminamos el misterio llegamos a contemplar el misterio trinitario. En efecto Cristo es el camino que nos conduce al Padre en el Espíritu.Ese es el sentido por el cual terminamos el misterio rezando el Gloria. Esta mirada hacia la Trinidad. Si recorremos éste camino hacia la Trinidad nos encontramos continuamente ante el misterio de las 3 personas divinas que se han de alabar,adorar y agradecer.Es importante que el Gloria culmen de la contemplación sea también cuidadosamente rezado en el rosario. Tal vez por ser breve la oraciión,tal vez por estar terminando el misterio puede pasar desapercibido pero nos recalca Juan Pablo II en su Carta Apostólica del Rosario de la Virgen María.La importancia que el Gloria sea el cúlmen de la contemplación y por lo tanto sea un momento también de profunda oración Alabar adorar y agradecer el misterio de las 3 personas. En la medida que la meditación del misterio que la vayamos ahondando en la contemplación del misterio de Ave María en Ave María por el amor a Cristo y María la glorificación trinitaria en cada decena en vez de relucirse aun momento rápido de conclusión va teniendo el tono contemplativo que se merece asi como la Transfiguración en el Monte Tabor que es la anticipación de lo que vamos a contemplar en el futuro Cuando rezamos el rosario no estamos haciendo otra cosa que desde el contemplar terminar diciendo lo que Simón Pedro en el Monte Tabor en la Transfiguración en el capítulo 9 del Evangelio de San Lucas: que bueno es estarnos aquí
Que bueno es contemplar el camino de amor de Jesús por nosotros ,es bueno contemplar el camino de la mano de María que nos lleva a Jesús.Tal vez una de las ideas fuerza que nos regala la Carta Apostólica del Papa Juan Pablo II sea ésta expresión de donde está Jesús allí nos encontramos con el amor del Padre.Donde está la Madre nos encontramos con Jesús
Padre Gabriel Camusso